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En más de una ocasión hemos hablado de las hipotecas verdes y de cómo están revolucionando el mercado hipotecario. Y es que además de ser un producto innovador que ofrece numerosos beneficios, permite cuidar el medioambiente y promover las viviendas sostenibles.

Parece que todo son ventajas por lo que respecta a este tipo de hipotecas. Sin embargo, no todo el mundo las puede solicitar, ya que dependerá de varios requisitos, tanto por parte del cliente, como de la vivienda sobre la cual se pide el préstamo.

Desde Hipotecas.com analizaremos cuáles son las principales características y ventajas de las hipotecas verdes, así como los requisitos que tiene que cumplir una casa para poder pedir una hipoteca “eco”, que es como también se conocen estos préstamos hipotecarios.

¿Qué es una hipoteca verde y qué beneficios ofrece?

Las hipotecas verdes son aquellos préstamos destinados a financiar la compra, la construcción o la rehabilitación de viviendas eficientes energéticamente. Por lo tanto, permiten financiar la compra de  inmuebles cuya calificación energética sea A o B, construir casas eficientes o rehabilitar viviendas antiguas para hacerlas más eficientes desde el punto de vista de consumo energético.

Dado que, en general, las entidades ofrecen mejores condiciones financieras para este tipo de hipotecas que para los préstamos convencionales, se podría decir que las hipotecas verdes nacen con la finalidad de promover e impulsar las viviendas respetuosas con el medioambiente. 

¿Cuáles son los beneficios de contratar una hipoteca verde?

Un inmueble eficiente consume menos  energía, lo que se traduce en un ahorro anual en tus facturas del hogar, que podría llegar a los  4.000 euros de media.  

La demanda de viviendas energéticamente eficientes se ha disparado en los últimos meses. De hecho, desde el inicio de la pandemia se ha incrementado un 30% la búsqueda de este tipo de inmuebles, de acuerdo con un estudio realizado por el Consejo General de los Colegios Oficiales de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria en España que, además de ahorrar, contribuyen a construir una sociedad más sostenible y respetuosa con el planeta.

Cómo debe ser una vivienda para poder acceder a una hipoteca verde

Cualquier empresa o persona física puede solicitar una hipoteca verde, sin embargo, solo le será concedida para financiar la adquisición, la construcción o la rehabilitación de una vivienda sostenible. 

Como ocurre con el resto de las hipotecas del mercado, las personas que quieran acceder a una hipoteca “eco” deben acreditar que tienen la solvencia suficiente para poder hacer frente a las mensualidades de ésta. 

Los requisitos que debe cumplir la vivienda para poder acceder a una hipoteca verde son sencillos. El principal requisito que tienen estas hipotecas es que el dinero que recibimos de la entidad financiera lo invirtamos en un inmueble que se pueda calificar como “sostenible”, diferenciando en este caso dos situaciones:

• Construcción o compra de una vivienda sostenible: Es decir, usar el préstamo para adquirir una vivienda que cuente con un certificado energético que sea A o B.
• Rehabilitación de una casa para mejorar su eficiencia energética: Es decir, usar el dinero que nos presta el banco para reformar una vivienda pero que, al hacerlo, dicha vivienda mejore su calificación energética.

En caso de que el inmueble tenga una calificación A o B  podrá acceder a una hipoteca verde. En caso contrario, deberá demostrar que se pueden llevar a cabo los cambios y reformas suficientes para mejorar la calificación energética del inmueble.

Para saber si es posible lograrlo, el mismo técnico que visite el inmueble para determinar qué calificación energética tiene, hará unas comprobaciones específicas, como analizar el aislamiento térmico y acústico de la vivienda, el tipo de instalaciones, cuánto consume y contamina, y el estado del inmueble en general. De esta manera, sabrá si con las modificaciones pertinentes se logrará la mejora de la eficiencia energética perseguida. En caso afirmativo, será posible acceder a una hipoteca verde, que permita financiar dichas reformas. 

Cabe destacar que desde el año 2013, todas las propiedades en venta o alquiler están obligadas a disponer del certificado de eficiencia energética (cuyo precio es de entre 45 y 95 euros). En caso de no tenerlo, los propietarios pueden enfrentarse a multas de hasta 6.000 euros.

Como apuntábamos, además del certificado de eficiencia energética, para solicitar la hipoteca “eco” necesitaremos la misma documentación que precisaríamos para el resto de los préstamos hipotecarios tradicionales, para que el banco o entidad pueda evaluar nuestra solvencia económica.

La existencia de las hipotecas verdes deja constancia de que tanto los bancos como los consumidores estamos cada vez más concienciados de la importancia que tiene cuidar del medioambiente y del planeta. Y es que es una cuestión de todos.

*Fuente:fotocasa.es